Encontrar la cuentoterapia tuvo algo de mágico para mi pues sin conocer su existencia tenía siempre presente el poder que los cuentos tuvieron en mi niñez. Encontrar esta formación me ha permitido iniciar la construcción de otros sentidos para los cuentos a través de la pasión que Carmen compartió en Medellin y ha movilizado sentimientos y comprensiones en mi viaje personal y profesional que me llena de deseos de continuar mi busqueda como cuentoterapeuta.
Gracias Carmen!